A continuación os explicamos cómo trabaja la DGT en estos controles de consumo de drogas.
Cifras y otros datos
Aproximadamente, un 10 % de los conductores conduce bajo los efectos de drogas ilegales. Por ello, la DGT tiene preparada una gran inversión económica, que hará que los controles antidrogas se equiparen, en frecuencia, a los de consumo de alcohol.
La saliva es el fluido que se utiliza para la detección de drogas, en los controles. Es donde inmediatamente se puede constatar el consumo, ya que, en orina, puede tardar unas horas y un análisis de sangre es demasiado invasivo. Cuanto más reciente sea el consumo, más alta será la proporción detectada en la saliva.
Negarte a pasar el control antidroga está considerado delito y tiene una pena de seis meses a un año de cárcel, así como la retirada del carnet (de uno a cuatro años).
Obtener positivo encierra también sanciones muy graves. Si las sustancias no influyen en la conducción, se quitan 6 puntos del carnet y se paga una multa que rondará los 1.000 euros. Mucho peor sale la jugada si las drogas son consideradas tóxicas para la conducción, ya que se retiraría el permiso de conducir de uno a cuatro años y habría prisión de tres a seis meses, ya que se considera delito.
En caso de accidente, se puede solicitar un análisis de sangre como prueba de contraste. Actualmente, se quiere reducir el tiempo para realizar esta prueba, después del siniestro.