Desde el pasado 12 de octubre ha entrado en vigor el nuevo etiquetado de combustibles. Ya nos hemos despedido de la denominación gasolina 95 y 98, ahora se pasarán a llamar de otra forma.
Este cambio proviene de la Unión Europea. El objetivo es conseguir que la totalidad de los vehículos y estaciones de servicio (españolas y europeas) posean la misma identificación para el combustible.
Así son las nuevas etiquetas para el combustible de los vehículos
Cada tipo de combustible tiene un diseño específico:
- Gasolina. Los distintos tipos de gasolina estarán rodeados por un círculo. En su interior observaremos una letra E y una numeración. La numeración indica los biocomponentes específicos que contiene la gasolina: E5, E10 y E85.
- Diésel. Las etiquetas serán de forma cuadrada para el gasóleo. En su interior, su letra distintiva será la B y unos números que harán alusión a los biocomponentes del carburante: B7 y B10.
Hay otro tipo de etiquetado, para identificar el diésel sintético o parafínico, que no procede del petróleo. Es un cuadrado con las letras XTL.
- Combustibles alternativos. El gas natural comprimido (CNG), el gas licuado del petróleo (LPG), el gas natural licuado (LNG) y el hidrógeno (H2) tendrán las letras en el interior de un rombo. Las siglas hacen referencia a su nomenclatura inglesa.
¿Dónde veremos el nuevo etiquetado de combustibles?
Podremos observar el nuevo etiquetado de combustibles en los surtidores de las estaciones de servicio, concesionarios y vehículos.
La normativa europea dicta que la totalidad de los turismos, motocicletas, ciclomotores, triciclos, cuatriciclos, vehículos comerciales pesados y ligeros, y autobuses de nueva fabricación han de mostrar una pegatina en la tapa del depósito de gasolina en la que se avise del tipo de carburante con la nueva nomenclatura.
El nuevo etiquetado de combustibles también es necesario que aparezca en el manual de usuario.