La seguridad es un concepto muy importante. Más aún, si cabe, en el caso de la protección de los niños. Por su especial vulnerabilidad, es preciso contar con sistemas adaptados, para asegurar que viajan en condiciones totalmente seguras. Pensando en esto, una empresa española ha desarrollado un modelo de sillitas para niños que viajan en autobús.
La empresa Euroslog pensó cómo aumentar la seguridad para los niños en sus viajes en autobús y desarrolló un sistema novedoso en el mercado de las sillas de retención.
El modelo Kidy Bus Harness es una silla homologada, con la que los niños con peso comprendido entre 15 y 27 kilos pueden viajar con total seguridad. Su sistema cuenta con cinco puntos de anclaje y posee dos tiras que sujetan al niño por los hombros y el estómago, las cuales van unidas a un punto central, ubicado entre las piernas. Es un sistema muy similar al utilizado en los coches. A su vez, la silla está fijada a la butaca por dos tiras, de tal forma que no pueda salir despedida en caso de una frenada fuerte o realización de una maniobra brusca.
Puede usarse en butacas que tengan cinturones de dos o tres puntos y es plegable y portátil, además de que puede limpiarse con facilidad. Estas ventajas hacen que pueda adaptarse a la gran mayoría de autobuses utilizados para el transporte de viajeros.
La primera empresa que disfrutará de estas sillas es GNP, con la que Euroslog tiene un acuerdo de comercialización. Sin embargo, la seguridad está al alcance de cualquiera, al ser su precio de comercialización de entre 95 y 110 euros, en función de la cantidad de pedidos.
La ley obliga a llevar a los autobuses homologados a partir de octubre de 2007 cinturones de seguridad, por lo que es un complemento ideal no solo para éstos, sino también para el resto, que circula sin sistemas de retención.
