La presencia de la mujer en el sector del transporte sigue siendo baja, aunque es cierto que dependiendo de las áreas. Las mujeres conductores profesionales alcanzan el 2% del total de los empleos de chófer, pero en cambio en ámbitos como la logística o la administración el número de puestos ocupados por mujeres se asemeja al de ocupado por hombres.
La problemática de todo esto está en los puestos directivos donde el “techo de cristal” a pesar de que se observa un avance, se mantiene muy presente. El pasado 8 de junio se celebró el primer Congreso de la Mujer en el Transporte donde se analizaron los puntos fuertes, las oportunidades y los problemas que pueden encontrar las mujeres en un sector que históricamente y a día de hoy está muy masculinizado.
La importancia de acercar el sector a la mujer y hacerlo llamativo para el conjunto de la sociedad es clave para evitar tener una visión anticuada o negativa hacia una profesión tan válida y necesaria para la ciudadanía. Mayor visibilidad, seguridad y mejores condiciones laborales y de conciliación son algunas de las reivindicaciones de la mujer conductora profesional.
Además, uno de los temas propuestos en la charla fue el de acercar la profesión a ferias de empleo o de educación para captar la atención de las nuevas generaciones sean hombres o mujeres para aumentar el número de chóferes y hacer crecer ese relevo generacional necesario para que este servicio no deje de girar.
En definitiva, durante este congreso se dio voz a una realidad que está ahí y a la que se le debe dar el espacio necesario para ser escuchada y fomentar así el cambio que tanto conductores como conductoras buscan para los próximos años.
