Cada vez es más común ver el mismo gesto a nuestro alrededor. Antes la infracción consistía en hablar por teléfono mientras se conduce, pero con la llegada de las redes sociales y el gran consumo que hacemos de ellas, es muy fácil ver como se escriben whatsapps mientras se conduce o se miran las últimas notificaciones.
Incluso ello nos ha llevado a grabar vídeos en directo en plena conducción o a incitar a retos, como el famoso #inmyfeelings, en el que una persona baja del coche en marcha y baila con la puerta abierta.
Las distracciones son actualmente, la primera causa de accidentes mortales, superando a los ocasionados por consumo de alcohol y por velocidad.
Cada vez somos más adictos a los teléfonos y normalizamos acciones como chatear mientras conducimos. Por ello, el director general de Tráfico, Pere Navarro, ha decidido dar una respuesta a este incremento de infracciones, anunciando que se está considerando la opción de subir de los tres puntos de retirada actuales, a entre cuatro y seis.
Aprovecha también para mencionar su desacuerdo con el uso de los navegadores mientras se conduce. La opción más segura sería, que el navegador detecte que el vehículo está en marcha y no admita programar una dirección. Algunos fabricantes teléfonos móviles ya han implementado la opción de activar en los teléfonos el “modo coche”.