Hya novedades en el examen de conducir. Desde el pasado 15 de septiembre de este año ya se pueden utilizar los sistemas de ayuda a la conducción en los exámenes para obtener el permiso de conducir
Los sistemas de ayuda a la conducción son un grupo de tecnologías que ayudan a reducir los riesgos que pueden surgir cuando se circula. Todos los automóviles modernos integran cada vez más estos sistemas que incrementan notablemente la seguridad. Se conocen bajo las siglas ADAS (Advanced Drive Assistance Systems) y van desde el control de crucero adaptativo, el aviso de cambio involuntario de carril, la frenada automática de emergencia o el detector de fatiga. Son tan importantes que estos sistemas serán obligatorios en los vehículos nuevos a partir del año 2022 conforme a la normativa europea
Hasta ahora, para realizar el examen práctico de conducir no se podían utilizar vehículos que tuvieran alguno de estos sistemas avanzados de ayuda. Esto suponía un problema para las autoescuelas, ya que la mayoría de vehículos incluyen de serie algunos de ellos. Pero la DGT se adapta por fin a los nuevos tiempos y desde el 15 de septiembre permitirá que los alumnos que se examinen del carnet de conducir puedan hacer uso de estos avances.
La Dirección General de Tráfico ha anunciado que durante el examen se podrán utilizar los siguientes sistemas, aunque también advierte de que si su uso o entrada en funcionamiento obedece a la impericia del conductor, lo tendrá en cuenta el examinador y el alumno podrá ser penalizado.
- Start-Stop: sistema de arranque del automóvil. Apaga el motor cuando está al ralentí y lo vuelve a encender cuando se pisa el embrague.
- Sistema de ayuda de salida en pendiente: conocido como Hill Holder, este dispositivo cuenta con un sensor que detecta el ángulo de inclinación en el que se encuentra el coche impidiendo que el automóvil se vaya hacia atrás al levantar el pie del freno.
- Activación automática de alumbrado y limpiaparabrisas: ambos sistemas se activan cuando un sensor detecta una disminución de la visibilidad o presencia de lluvia suficientemente significativa.
- AEB (Frenado de emergencia urbano e interurbano): en caso de despiste del conductor y riesgo de colisión por alcance, el sistema es capaz de detectar un peligro inminente y actuar avisando al conductor, normalmente mediante un pitido, de que hay riesgo de colisión o, en caso de que el conductor haga caso omiso a dicha advertencia; el sistema AEB tomará el control del vehículo para detenerlo, realizando para ello, una frenada de emergencia.
- RCTA. Alerta de tráfico cruzado: el sistema supervisa el tráfico trasero en sentido transversal al salir marcha atrás de un hueco de aparcamiento en batería. Si detecta un vehículo aproximándose y el tiempo estimado de colisión entre ambos es de 2 a 3,5 segundos en base al cálculo de la distancia relativa/velocidad relativa, se emitiría un aviso sonoro y/o visual en la pantalla multifunción del vehículo o en los propios espejos retrovisores exteriores.
- Cámara de marcha atrás y 360o y/o sensores de aparcamiento: la finalidad de la cámara de marcha atrás y de la cámara 360° es la de permitir al conductor tener un mejor visionado y percepción del entorno en el que se encuentra, ya sea para realizar un estacionamiento, ir marcha atrás o maniobrar en espacios con reducida visibilidad.
- Sistema de detección de fatiga: alerta al conductor en situaciones en las que pierda la concentración al volante, ya sea por fatiga o sueño, para así evitar posibles accidentes.