Cuando cumplimos 18 años, se abre un abanico de nuevas oportunidades, y una de las más esperadas es la de poder conducir. Aunque muchos jóvenes ya conducen motos desde los 16, el coche sigue siendo el sueño de muchos y muchas al llegar a la adultez. Pero antes de disfrutar de esa libertad al volante, hay dos pruebas clave que superar: el examen teórico y el práctico.
En el examen teórico, los alumnos deben responder 30 preguntas tipo test en un máximo de 30 minutos. De esas 30, solo una tiene la respuesta correcta, lo que puede parecer fácil, pero no lo es tanto. Muchos se enfrentan a preguntas que, aunque parecen sencillas, generan más fallos de lo esperado. Un estudio realizado por Pons Seguridad Vial reveló cuáles son las preguntas que más dificultad causan entre los futuros conductores. Las preguntas más problemáticas están relacionadas con la confusión de señales de tráfico, un tema que parece claro pero que, en realidad, puede generar dudas. Las señales a veces se parecen tanto entre sí que los aspirantes suelen interpretarlas de manera equivocada, especialmente si no las han repasado a fondo. Otras preguntas difíciles están relacionadas con normativas legales y aspectos del Reglamento General de Circulación, que requieren memorizar muchos detalles. Aunque hay posibilidad de reintentar el examen tras dos fallos, es importante prepararse bien para no tropezar con estas preguntas más complicadas. Así que, antes de presentarte al examen, practica y estudia muy a fondo. ¡No dejes que estas preguntas te detengan en tu camino hacia el carnet!
